Tras la Guerra Civil, con el edificio del Seminario de aquel entonces (ubicado en la calle Trinquete Caballeros de Valencia) saqueado, quemado y en pésimas situaciones de habitabilidad, era necesario un lugar de formación para los futuros sacerdotes.
En 1943, el Arzobispo D. Prudencio Melo creó una junta de sacerdotes y laicos para asesorarle sobre la construcción de un nuevo edificio y, finalmente, el 21 de abril de 1944, el Arzobispo firmó las escrituras para la adquisición de los terrenos necesarios en Moncada.
El 15 de mayo de 1944 fue colocada la primera piedra y comenzaron las campañas diocesanas para recaudar los medios económicos necesarios para la edificación del Seminario Metropolitano. Se trataba de una obra inmensa que requería mucho esfuerzo, y los medios eran muy escasos, ya que estábamos ante un Diócesis asolada por la guerra, arrasada y empobrecida.
A pesar de todo, el corazón del pueblo valenciano se volcó en la obra y en octubre de 1948 (5 años después de la colocación de la primera piedra) se trasladaron los seminaristas al nuevo edificio, que aún estaba en construcción. La Iglesia del Seminario fue inaugurada el 4 de mayo de 1958, pero los trabajos para edificar el Seminario no concluirían hasta 1966.
En el seminario tenemos tres capillas que utilizamos diariamente: la Capilla de la Inmaculada o de la etapa de Configuración, la capilla de la comunidad de Discípulos y la Capilla del curso Propedéutico. Además, contamos con una iglesia en el centro mismo del edificio del seminario, donde celebramos los actos más destacados.
En las capillas nos encontramos toda la comunidad del seminario a lo largo del día para celebrar la Eucaristía, rezar las Laudes o las Vísperas en comunidad o para tener un rato de oración, tanto de manera comunitaria como personal.
En la iglesia celebramos el Rito de Admisión, los Ministerios de Lectorado y Acolitado, el Orden del Diaconado, la eucaristía del festival de la canción vocacional...
Para los seminaristas, estos son los lugares más especiales de la casa: es allí donde vamos forjando y fortaleciendo cada vez más nuestra vocación, entrando en la presencia del Señor y escuchando día a día el mensaje que tiene reservado para cada uno de nosotros.
La biblioteca del Seminario es el lugar donde encontramos las fuentes de aquello que es objeto de nuestro estudio. En ella hay tres salas en las que están las diversas secciones que abarcan desde Historia general hasta las secciones de revistas teológicas, pasando por secciones de Liturgia, Ecumenismo, Filosofía, Psicología y un largo etcétera.
En este lugar los seminaristas estudiamos, compartimos nuestros conocimientos con los hermanos y nos formamos intelectualmente. Para el mantenimiento, la clasificación y la modernización de la biblioteca hay dispuesta una comisión de trabajo formada por los propios seminaristas.
Una parte a destacar de las instalaciones del seminario son sus zonas deportivas, las cuales están a disposición de los seminaristas en todo momento. Disponemos de una pista de frontón, una piscina de grandes dimensiones (actualmente no disponible), un campo de fútbol sala y pista de baloncesto, un campo de césped y un pequeño gimnasio con mesa de ping-pong. Todo ello está al aire libre para disfrutar del tan privilegiado entorno del seminario, a excepción del gimnasio.
Uno de los acontecimientos deportivos más importantes del año en el seminario son los campeonatos (de fútbol, baloncesto, frontón, ping-pong…) que se celebran con motivo de la novena de la Inmaculada, patrona del Seminario. Y desde hace unos años, las instalaciones deportivas acogen el Campeonato Anual del Seminario, donde participan equipos de multitud de parroquias de la toda la Diócesis.
Un buen complemento a estas instalaciones son las zonas exteriores: una pequeña pinada, dos patios interiores con césped, una pequeña extensión con árboles frutales, jardines…
Por último, en el interior de la casa también disponemos de lugares comunes: el comedor, la sala de ordenadores y de reprografía, el Aula Magna, diversas aulas para reuniones, las distintas clases de música y salas de estar.
Junto al Seminario, se encuentra el Monasterio de Santa María de los Desamparados, perteneciente a las Hermanas Oblatas de Cristo Sacerdote, la congregación fundada por el Venerable José Mª García Lahiguera, obispo de nuestra diócesis.
El Monasterio de Moncada se fundó el 2 de febrero de 1970. Tras 25 años, se inauguró un nuevo monasterio el 2 de diciembre de 1995.
La Comunidad de Moncada junto a toda la Congregación es muy apreciada por los sacerdotes y seminaristas de la diócesis de Valencia:
“Para el Seminario, las hermanas Oblatas son uno de los grandes regalos que la Iglesia nos concede. Poder contar en nuestra formación y posterior ministerio con el apoyo inquebrantable de su entrega, es un gran consuelo en todos los momentos. Es la experiencia de la comunión de los santos, es la certeza del poder de la oración.”
¿Necesitas que recemos por ti
o por alguna intención concreta?
Para nosotros será un placer
unirnos a ti en oración...
96 139 02 00
seminariomayor@archivalencia.es
c/ Camí Pla de Foios, s/n
46113 Moncada (Valencia)